El modelo conceptual más pequeño del fabricante británico es también el percusor del que será el cuarto Rolls desarrollado bajo el mandato de BMW. Como ya sabíamos, su chasis deriva del utilizado en la última generación del Serie 7, aunque las diferencias son marcadas. A pesar de que ambas berlinas comparten las principales estructuras de absorción de impactos (parafraseamos), a efectos prácticos, sólo el 20% de los componentes son comunes. Es más pequeño que un Phantom (-45 cm), pero más grande que un Serie 7 2009. Su distancia entre ejes, también es propia.
En cuanto al motor, parece que el famoso Baby Rolls o RR4 recibirá un nuevo y exclusivo bloque de doce cilindros en V. Su tamaño es por el momento una incógnita, pero parece que tendrá 6,0 litros en lugar de los 6,75 del Phantom. Su arquitectura estará basada en el 4,4 V8 biturbo empleado en el BMW 750i. ¿Potencia? Por el momento ese es un detalle que deberá esperar, al igual que el resto de los detalles técnicos del coche.
Si todo va sobre ruedas, en el Salón de Frankfurt deberíamos encontrarnos con la versión definitiva del modelo, virtualmente idéntica al concept de Ginebra.
Fuente: Autoblog
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