El Breckland Beira; de bases en la plataforma Kappa de General Motors (Opel GT, Saturn Sky…) y equipado con un motor V8 LS2 de 6 litros de cilindrada y 400 CV, de origen también GM, es nada menos que el arma “secreta” para que Breckland se convierta en la última empresa en incorporarse al selecto grupo de fabricantes de aquellos vehículos ligeros con una gran potencia y elevado grado de desempeño.
Punto fuerte de este roadster ligero se encuentra en que es capaz de funcionar con gasolina corriente y el poco habitual gas licuado de petróleo (GPL), el cual le proporciona 700 km de autonomía. El citado motor V8 permite al roadster acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos y alcanzar una velocidad máxima de más de 250 km/h en medio de una marea de par motor. La relación peso-potencia es muy buena debido al contenido peso del deportivo: la balanza marca unos parcos 1.400 kg, ideales para mantener las prestaciones y asegurar un buen comportamiento.
Si bien a simple vista se asemeja al Opel GT, su carrocería posee un aire más distinguido; esa refinada deportividad sólo los ingleses la dominan a la perfección. Un estilo muy cuidado que también se extiende por el interior, cubierto de cuero Alcantara y con unos asientos realmente bonitos.
Cabe mencionar que las ventajas de producir un deportivo basado en plataformas y motores ya existentes se encuentran en que ayuda a mantener los costes bajo control y permite a los ingenieros centrarse en aspectos como el chasis y el comportamiento dinámico, muy cuidado en el Beira gracias a sus suspensiones firmadas por KW y sus frenos de 325 mm en las cuatro ruedas.
El precio del potente roadster se cifra en unas 55.000 libras, unos 70.000€ al cambio. Se espera que el vehículo se ponga a la venta en Noviembre de este año llegando a toda Europa, apuntando competir con rivales como los Mercedes SLK o Porsche Boxster.
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