Tan solo unos meses después de haber lanzado mundialmente la nueva generación del C-Class sedan, Mercedes-Benz presentó en el reciente salón de Tokio la flamante variante station-wagon de dicha gama. Denominado C-Class Estate, este compacto alemán de lujo se destaca por su alto nivel de tecnología aplicada a la mecánica, el confort y la seguridad y por su agilidad y equilibrio en el andar. Dada su orientación primordialmente familiar, el C-Class Estate incorpora ideas y soluciones versátiles como por ejemplo el portón trasero de apertura automática electro-hidráulica y el baul con ganchos para sujetar bolsas, redes porta-objetos y 4 anillos para anclar las cargas. Los asientos traseros rebatibles del “C Estate” permiten ampliar su espacio de carga de 485 hasta 1500 litros (según el método VDA, dice la marca. Método que desconocemos, por cierto).
La amplia gama de motores de 4 cilindros y V6 que equipa a este M-B incluye 5 opciones nafteras y 3 turbodiesel a inyección directa. Todos estos impulsores -excepto el V6 3.5 Lts de 282 HP que equipa al modelo C 350- vienen acoplados de manera estándar a una caja de velocidades manual de 6 marchas (el cambio automático se ofrece como opción). El C 350, por su parte, cuenta de serie con una caja de cambios semiautomática 7G-TRONIC de 7 velocidades. Los rangos de potencia de los motores que equipan al C-Class Estate van desde los 136 HP hasta los 282 HP del mencionado C 350.
Como no podía ser de otra manera, el equipamiento para la seguridad y el confort en esta nueva versión de la Clase C es de primer nivel. En cuanto al primero de estos aspectos, cabe destacar la inclusión de manera estándar de los sistemas de frenado asistido y de control de tracción y estabilidad electrónicos. En lo que hace al confort, por otro lado, el nuevo C-Class incluye un novedoso sistema integrado de información y entretenimiento que recibe órdenes por reconocimiento de voz. El comportamiento dinámico es otro punto destacado del C-Class Estate: la rigidez de sus suspensiones se regula en forma automática para brindar a los ocupantes del vehículo la mayor comodidad y seguridad, cualesquiera sean las condiciones de manejo. Asimismo, se ofrece en forma opcional para el modelo un programa electrónico adicional de control de las suspensiones deportivo con 2 modos predeterminados de manejo (“comfort” y “sport”). El mismo viene acompañado por una reducción en la altura del vehículo de 15 mm y por un juego de amortiguadores y barras de torsión especiales. Como si todo ello fuera poco, Mercedes-Benz ofrecerá adicionalmente una variante AMG -“tuneada en fábrica”- del C Estate. Esta versión contará con motor V8, llantas de 17” y un esquema de suspensiones aun más radicalmente deportivo. Quedan entonces bien evidenciadas las intenciones de la marca alemana: ganar más terreno en el mercado de los vehículos de lujo familiares a través de una propuesta que no es nueva, pero sí original en estos tiempos: el C-Class Estate es un auto (y uno más bien deportivo); no es una minivan ni un crossover, pero ofrece la misma versatilidad que aquellos. Las cifras de venta dirán si esta apuesta de la casa teutona fue acertada o no.
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